martes, 20 de septiembre de 2011

La religión: ¿Un sistema heredado?

En sistemas informáticos, cuando hay uno anticuado que no se puede reemplazar, esto se llama un sistema heredado. Generalmente se resisten reemplazos a tales sistemas porque perturbarían negocios en curso o los desbaratarían por completo. Busque en la industria médica, de educación, automovilística, o de energía y usted encontrará--con varias medidas de facilidad--que hay soluciones en pie que existen por ser lucrativas aunque no prácticas. Las religiones dependientes de la Biblia tampoco son exentas de ser sistemas heredados. En breve explicaremos por que esto es cierto y como podemos ayudar a actualizarlas para el bien de todos.

miércoles, 20 de julio de 2011

Credibilidad: Lucas vs. Pablo

La lectura Pensando por Dios explora la posibilidad de que Pablo no se purificó, junto a los cuatro hombres que tenían que cumplir voto en el templo de Jerusalén, para enseñar que él todavía guardaba la ley (como dice Hechos 21:17-26). Aparte de que Pablo deja la impresión que fue muy celoso del mensaje que comunicaba y que él no dejó indicación de volver a la ley en sus escritos, fíjese en Gálatas:

Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia, revelar a su Hijo en mí, para que yo le predicase entre los gentiles, no consulté en seguida con carne y sangre, ni subí a Jerusalén a los que eran apóstoles antes que yo; sino que fui a Arabia, y volví de nuevo a Damasco. Después, pasados tres años, subí a Jerusalén para ver a Pedro, y permanecí con él quince días; pero no vi a ningún otro de los apóstoles, sino a Jacobo el hermano del Señor. En esto que os escribo, he aquí delante de Dios que no miento (1:15-20).

Aunque estas palabras no son prueba concluyente de que Pablo jamas renegó sus creencias al ser enfrentado, sí son indicativa de su necesidad de disipar cierta información sobre él. Contrario a lo que dice Lucas en Hechos, Pablo comparte que no fue a Jerusalén primero y que solo vio a Pedro cuando finalmente llegó. Lucas, entonces, no lo pudo haber visto. Más interesante, sin embargo, es su encuentro con Pedro después de catorce años:

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar. Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión.Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos. Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar (Gálatas 2:11-14)?

En vez de someterse a unos judíos, aquí vemos a Pablo enfrentando a Pedro frente a todos por hipócrita y por obligar a los gentiles a judaizar. ¿Luce Pablo como el tipo de persona que se somete fácilmente? ¿Tendrá base lo que afirma Lucas? No podemos descontar que Pablo en verdad renegó (por interés, por amenaza, etc.) pero tampoco podemos negar que él comunicó que defendió sus creencias. ¿En cuál acontecimiento cree usted: el de Lucas, Pablo, ninguno, o una mezcla de los dos?

domingo, 17 de julio de 2011

Pensando por Dios

La Biblia fue escrita por varias personas en varios siglos y con varias motivaciones. Muchos la presentan como la palabra infalible de Dios y la usan para guiar sus vidas. A pesar del poder y recursos de cualquier presumida autoridad que diga lo contrario, hay mucha falibilidad en la Biblia. En vez de negar y seguir viviendo en error (o rechazar y olvidar), tenemos que abrazar esta realidad para conocer más sobre la naturaleza actual. Como consecuencia produciremos más altos conceptos que nos capacitaran y orientaran con esta naturaleza. Al final esto generará importantes beneficios a nuestros conceptos de Dios, la moralidad, los hechos de nuestra historia, y el futuro. Si resistimos, permaneceremos conociendo una naturaleza basada--por más conveniente que sea--en la inmutable falsedad.